El martes viajamos a San Luis y entregamos –en mesa de entradas del ministerio de educación- el plateo de revocatoria y la carpeta que contiene: la nota redactada en asamblea de la
comunidad educativa, las planillas de firmas (2.900); las notas de adhesión de instituciones intermedias y la declaración del HCD.
Se concretó, además, una asamblea con compañeros del IFDC de San Luis, que estaban acompañados por su abogado.
Luego de un intercambio de pareceres y antecedentes, más un breve análisis de situación y posibilidades de pasos a seguir, se estableció que la fuerza del reclamo debería ponerse en la continuidad de las carreras cerradas por las resoluciones 219 y 220. Y que resulta necesario unificar el discurso en torno a eso.
Varios compañeros quedaron en contacto con los de San Luis. De igual modo, esa misma tarde se determinó un programa de acciones para dar continuidad al planteo. Y creo que se designaron responsables para llevar adelante distintas acciones. Con buen criterio se estableció que quienes continúan al frente del plan de lucha, son compañeros que comparten criterios sobre el curso de acción establecido. Desde ahora, ellos continuarán informando sobre lo que suceda.
