Yo volví. Y volví pensando en cómo será la discusión por la recomposición salarial que -espero- comience lo antes posible. El año pasado, el gobernador anunció el incremento del 15 por ciento en el inicio del periodo legislativo; creo que fue el 1 de abril.
Este año está el componente especial de los cuestionados datos del INDEC. Y precisamente nuestras autoridades provinciales fueron de las más cuestionadoras de estos índices. De acuerdo al encargado de medir el índice aquí, el acumulado del año
llegaría al 23 por ciento.De manera que los empleados públicos ya arrastramos un deterioro del 8 por ciento, en lo que respecta a 2007, solamente.
Comparado con los
salarios de otras jurisdicciones y otras actividades también hemos perdido por goleada: hasta noviembre del año pasado,
la suba salarial promedio fue del 20.9 por ciento.A diferencia de lo que sucedió en San Luis, en donde los
salarios privados se despegaron de los públicos, la información publicada en
Clarín dice que los ingresos de los trabajadores privados aumentaron 18,4 entre enero y noviembre de 2007; para los empleados no registrados la suba fue del 22, mientras que los sueldos en el Estado crecieron 26,8.
La diferencia entre los incrementos de empleados públicos nacionales y sanluiseños - durante 2007- es de casi el 12 por ciento.
Otro dato que consigna el artículo es el acumulado desde la devaluación de 2002: para los privados la suba fue de 168 %, para los no registrados fue de 93 % y para el sector pùblico de 84 %.
Hay dos datos màs para tener en cuenta: el planteo que ya se ha conocido de docentes bonaerenses que reclaman un aumento del 30%; y, en lo que respecta al nivel superior, la evoluciòn de los
salarios universitarios.
Hasta pronto.