El texto que continúa me fue enviado por Tolo Gatica con pedido de publicación en este blog. Aquí está.
En realidad las versiones pueden ser muchas pero carecen de significación. La realidad es que se suman al hecho,las supuestas “desapariciones de Resoluciones Rectorales” que en realidad, porlo que se pudo saber, no era tal y de seguro con intención de desprestigiar aalguien que estuvo antes.
Se me hace, por las indagaciones cuasi policíacas a las que fui sometido,aparentemente para que dijera algún nombre relacionado con la pérdida dellibro, que aún persisten resabios de viejas metodologías procesistas.
Precisamente fui indagado por quien, junto a mí y al resto del profesorado, nos acusara ante lasautoridades gubernamentales, de ser poco menos que subversivos queconfigurábamos un peligro para aquel, justamente cuando presentaba una renunciaque nunca supimos si había hecho efectiva o no.
Aquella renuncia no fue espontánea, si es que la presentó, por cuanto setrataba de su permanente ausencia a las responsabilidades que le competían yque ulteriormente perjudicaban claramente todo el tiempo al IFDCVM.
Todo esto, seguramente consta en Actas del Consejo, si es que alguienquisiera revisar los hechos.
Tal situación de la que fui partidario para que se le pidiera la renuncia,me refiero al Prof. Garciarena, unido al hecho que siempre fui partidario y loseguiré siendo, de que la manera de elegir un rector era por vía de unaelección directa de todos los claustros, porque esa es y será la manera dedemocratizar los Institutos de Educación Superior y no mediante un meroconcurso al que nadie asistió o pudo ingresar para observar, resultaron en una “reacción”de parte de quienes no toleraron ni toleran tal posición ideológica.
La actual ley y las proyectadas, reconocen y requieren eso, no hace faltarecitar lo que todos conocen sobradamente.
Tales mis posiciones, que fueron y serán inclaudicables por cierto, ¿mehabrán acarreado problemas?.
Tal vez si, tal vez no, mi grado de subjetividad podría traicionarme,aunque queda para mi coleto que todo fue preparado, de todos modos el análisis, queda librado a la especulación de cadaquien.
Seguramente alguna o varias personas, se dice, habrían ingresado alestablecimiento fuera de horario, es decir cuando no había nadie y a horasavanzadas de la noche.
¿Si alguien investigó esto? No lo sé.
Solo sé que: a) no estaba contratado para oficiar de vigilante, solo loestaba para tareas administrativas, tales como trasladar horarios a ciertasplanillas para una presunta estadística.
b) Tampoco estaba para “vender” a nadie, aún cuando se me preguntabapermanentemente “quienes” llegaban en horario, quienes firmaban, quienes no yquienes podrían estar “forzando horarios”. Solo estaba contratado para aspectosmeramente administrativos.
c) Solo cumplía cuatro horas de trabajo, fuera de ése horario, en verdadtomaba café, porque me encanta socializar, es verdad y muchas veces lo hice conel propio rector, quien es un asiduo concurrente al Comedor “Las Margaritas” ymucho más cuando cumplía funciones de profesor.
Conclusión: me desagradan las cacerías de brujas, me desagrada que sepiense que la democracia es una perdida de tiempo, se negocien aspectos delproyecto de ley de Educación Superior sin consultar a los autores, que sontodos, en realidad. Que sean violentos cuando se debe demostrar cordura, comprensióny tranquilidad, me desagradan quienes actúan como perseguidos por el solo hechode no entender cabalmente la situación que les toca enfrentar y que se hable enausencia del interesado y menos que se lo acuse de “cafetero” cuando tan nobley sano placer también es practicado por quien acusa, mucho menos es posibleaceptar que todos Uds. incluyéndome, obviamente, estuvimos y estamossospechados, sin distinción de ninguna naturaleza ¿ y siguen en esa posición?.
Ahora, se firma dentro de la oficina con el administrativo observando, ¿Quésituación es esta?, ¿se buscaba eso precisamente?. Me parece que resultadenigrante y a ello no me presté ni me prestaría jamás.
Creo sinceramente que de ésta clase de conducción, no se puede esperar nadabueno.
Cada uno analizará la situación según crea conveniente.
De mi parte, creo que siempre cumplí y entregué lo mejor al Instituto,donde sin vueltas debo reconocer que estuve siempre muy bien, con todos Uds.
Nada más que decir y un abrazo y Felices Fiestas para todos.
Julio Gatica
