Escribo esto tres o cuatro horas antes de la marcha de este viernes.
Todo indica que va a ser multitudinaria, aunque en estos momentos llueva
a cántaros en Mercedes. Hemos sostenido una huelga durante cuatro
días, y hoy cumpliremos el quinto. El nivel de adhesión ha sido
altísimo, calculo que en promedio superó el 90% de inasistencias.
Se
han producido, además, dos o tres circunstancias sobre las que quiero
poner un acento porque considero que son de esas cosas que en el "calor
de la lucha" pueden pasar desapercibidas:
1 - Se está produciendo una
unidad del sector docente que no se evidenciaba desde hace 7 años.
Comenzó en las calles y está subiendo a las mesas de dirigentes. Espero
que se consolide, por el bien de todos y para aprovechar al máximo la
demostración de fuerzas que hemos hecho;
2- El gobierno ha dado indicios
de estar preocupado: adelantó el anuncio del aumento (que originalmente
sería anunciado el 1 de arbil); después especificó que la zona se
restablece (es decir que sale del complemento); ayer Salino ofreció
paritarias para los temas pendientes.
3- El altísimo nivel de adhesión
que conseguimos esta semana, a las medidas de fuerza, será difícil de
sostener (no porque nadie lo boicotee, simplemente porque ninguna lucha
se puede sostener por tiempo indefinido, aunque sea justa y sentida como
esta).
4- Algunos pensamos que los mejores resultados en las
negociaciones se obtienen cuando nos sentamos desde una posición de
fuerza. Y el mejor momento será, creo, el que vivamos después de la
marcha de hoy. La semana que viene, probablemente, la situación entrará
en la curva descendente del lógico desgaste.
Por la apretada síntesis
que antecede, creo que:
- El lunes deberíamos volver a las aulas y
mantenernos en estado de asamblea permanente;
- Tomar los dichos de
Salino en llamar paritaria docente y sentarse con una posición
unificada entre los cinco gremios y con la fuerza de la experiencia de
esta semana;
- Seguir trabajando en la conformación de una mesa
intersindical (con representación de los cinco gremios docentes) y
definir algunos puntos con los cuales sentarse a negociar con el
gobierno.
Los puntos que, me parece, tienen que conformar ese núcleo: no
descuento de los días de paro | traslado (inmediato o progresivo) de la
suma complementaria al básico | normalización (inmediato o progresivo)
del pago de doble cargo | programación de la oferta de formación docente
a mediano y largo plazo | revisión del Estatuto Docente | y otras
cuestiones relacionadas con las Juntas, el Consejo, la titularización,
los títulos, etc. que ahora se me escapan, pero que se pueden incluir
en agenda de paritarias.